The Batman we need

La semana pasada se cumplieron 80 años de la aparición del personaje de Batman. La historia de como surgió este personaje es bien conocida por la mayoría de la gente. Un niño de ocho años sufre el trauma de ver asesinados frente a sus ojos a sus padres en un asalto después de salir de una función de cine. El trauma y sentimiento de culpa hacen al pequeño Bruce prometer combatir el crimen en todas sus formas y, debido a que cuenta con los medios económicos suficientes, se dedica a entrenarse física y mentalmente para poder cumplir su promesa. El niño que ve morir a sus padres frente a él se convierte así en un hombre con habilidades físicas de nivel olímpico, un intelecto prodigioso para la ciencia y tecnología y habilidades detectivescas sin igual. La única regla que no puede quebrar es la de matar a alguien pero fuera de eso, Batman hace uso de casi cualquier cosa para combatir al crimen en su ciudad que fue la promesa que hizo a sus padres.
Y bueno, ciertamente Batman es un personaje ficticio del cual podríamos pensar que solo lo necesitamos para que nos distraiga y entretenga durante dos horas en una película o nos haga gastar una pequeña fortuna en cómics y figuras de acción para nuestra tóxica satisfacción pero a veces, solo a veces, las narrativas se basan en momentos reales que la sociedad vive en un cierto periodo de tiempo. La ciudad Gótica de Batman ha sido tradicionalmente una ciudad gobernada por el crimen y la corrupción a todos los niveles de la sociedad y a la indiferencia de la gente hacia esta situación. Ya bien lo dice el personaje de Liam Nesson en Batman Begins "Los criminales prosperan por la indulgencia de la sociedad". Y es precisamente esta parte lo que me hace reflexionar.
Hoy día en mi país, México y particularmente en mi ciudad, Celaya, se esta viviendo una situación casi exacta; crimen y corrupción a todos los niveles y una completa indiferencia de la sociedad. Ya nos es normal vivir entre secuestros, sobornos, extorsiones, asesinatos a plena luz del día, ejecuciones masivas, fosas clandestinas, autoridades infiltradas hasta la medula por el crimen. Y nadie hace nada por cambiar esta situación. Y si te atreves a intentar siquiera hacer algo tarde o temprano pagaras las consecuencias.
Necesitamos un Batman en cada rincón de México. Necesitamos urgentemente un Batman en cada ciudadano decente de nuestras ciudades. Quizás no un Batman de 1.93 metros de altura y 95 kilos de peso que sea capaz de dejar incapacitados a 15 tipos en 2 minutos o un Batman que conduzca un tanque por las calles pero si una persona que no tire su basura en la calle, que si encuentra una cartera busque a su dueño en lugar de sacar el dinero y tirarla a la basura; una persona que trabaje para comprar su teléfono celular y no que lo robe o lo compre robado; una persona que diga "gracias", "por favor", "lo siento". Una persona que se indigne por la injusticia y que reclame a nuestros gobernantes mejores condiciones de seguridad y que ese reclamo sea firme y enérgico pero respetando la libertad y la propiedad de otros. Que exijamos cuentas y que seamos inteligentes a la hora de elegir a nuestros representantes públicos. Por favor, que no vendamos nuestro futuro por una mendiga pensión de 3 mil pesos al mes y que no nos dejamos engañar por personajes mesiánicos y muy malos jugadores de Beisbol.
El Batman que necesitamos quizás este mas cerca de lo que pensamos...O quizás no.