11:11 parte 4


- ¿Se encuentra bien señorita?
- ahh! si...creo que si...¿que paso?
- Escuche  unos ruidos, como si alguien hubiera caido, tengo mi puesto aquí a la vuelta, en la esquina y a esta hora no es muy seguro andar por las calles...¿trabajas ahí?
No sabia a que se refería pero intenté ponerme de pie...Cuando pasamos a este plano tenemos desorientación y falta de control muscular. el efecto pasa rápido pero lo importante es no aparecer en medio de una autopista o en un centro comercial repleto de gente. Miro a mi alrededor y es de noche, la calle esta sola pero viendo hacia donde el hombre que intenta ayudarme señala, se ven algunos automóviles circulando y dos o tres personas curiosas. También veo que señala una puerta con un anuncio luminoso. "Osiris men´s club"...Apenas voy llegando y mi "hermano" ya quiere cobrarme. 
- Si, ahí trabajo; bueno, espero trabajar...
- Debes tener cuidado niña, no es un buen lugar y yo sé que no es mi asunto pero tengo una hija mas o menos de tu edad y no quisiera que trabajara ahí. He visto a tipos que las golpean y se las llevan ebrias y después ya no regresan.
- Le agradezco sus palabras y su preocupación, créame que se cuidarme y por la edad creo que me veo un poco menor a la que realmente tengo.- Claro que no puedo decirle que tengo mas de 15mil millones de años humanos y que veré morir el universo y aún así yo seguiré aquí. Bueno, no...Si me convierto en humana seré como cualquiera pero aún no lo soy. Aún sigo siendo lo que soy.
- Ok niña pues cuídate mucho y apúrate porque si no te van a dejar sin sueldo. Cuando salgas ven al puesto y te doy unos taquitos de pilón...Me llamo Beto y tu?
- Karla, me llamo Karla...Y gracias por los tacos ya verá que le tomare la palabra.
Me levanto y me dirijo a mi "trabajo". Algo bueno es que podemos elegir ropa cuando pasamos a este plano y yo escogí unos jeans a la cadera, una blusa blanca de manga corta y hombros descubiertos, zapatillas negras y una bolsa de mano. Aparento unos 24 o 25 años de edad, soy de estatura mas bien pequeña y mi pelo es lacio, castaño y a media espalda. Atravieso el bulevar mientras voy pensando que decir. Conozco todas las actividades humanas y puedo manipular las situaciones para encajar en cualquiera de ellas pero esta es una de las mas antiguas y para mis fines creo que es ideal. Aquí no hay preguntas sobre tu pasado, no te piden identificación ni títulos, no necesitas cartas de recomendación y mucho menos hacer cientos de entrevistas para conseguir un puesto. Llego a la puerta y es tiempo de probar mis "habilidades"...
- Hola Juan, ¿no te acuerdas de mi?
- No, ¿quien eres?
- Soy Karlita Juan, ya ves? Que rápido se te olvidan las amigas, estuve aquí hace un año, cuando fue el aniversario...Oye le puedes hablar a Vivi? Dile que vine a trabajar, por favor...
-Ahh! Karlita, claro que si me acuerdo de ti, pero antes tenias el pelo diferente, ¿verdad? Lo tenias pintado de güera...yaa!! Claro chiquita deja y le hablo a Vivi, pasale al lobby mientras...
Puedo implantar recuerdos falsos en la memoria corta del cerebro. Nada que les afecte, lo olvidara cuando requiera ese espacio de memoria. Y teniendo en cuenta que conozco la vida de cada ser humano que ha existido no me es difícil saber exactamente que botón apretar. 
- ¿Karlita? ¿Eres tu?
- Hola Vivi, ¿como estas? espero que tu si te acuerdes de mi, no como este cabrón gordo de Juan...
- Claro que si pequeña, cuando me dijeron que estabas afuera no sabia quien eras pero ya que te veo, claro que si...¿cuanto tiempo te vas a quedar?
-Pues nada mas esta semana, tengo algunas cosas que arreglar pero estos días te voy a llenar el changarro, ¿como ves Vivi?
- Claro que si pequeña, pasate...Veo que no traes nada de ropa pero aquí adentro esta la señora que vende los trapos y si no traes dinero pues te los puedo descontar al final, ya sabes como son las cosas...
- Si Vivi, ya se como son...También voy a necesitar unos zapatos...
Cuando el amor te atrapa no hay nada que pueda escaparse. No hay sacrificio pequeño. No hay medida. Se entrega todo y no se espera nada. Yo estoy dispuesta a parar el mundo para estar contigo un minuto. Estoy en tu ciudad, estoy en un antro que visitas de vez en vez y te estoy esperando...Ricardo, ¿Donde estas? 


Camino por el borde del acantilado de "Paradise City"...Así le puse a la ciudad de pura mamada...Ya le tome unas cuantas fotos desde acá arriba y ojala y me las paguen bien y no vayan a salir con que son "fotoshopeadas"...Ni que fueran de viejas...Estoy buscando como bajar pero el borde es muy grande y no he encontrado nada. Ya me parto de hambre y en este pinche lugar ni siquiera hay gusanos que me pueda comer. ya los busque en la hierbita...Si les cuento que ni piedras hay! Ok, ya llevo como 3 kilómetros caminando y nada. Estoy rodeando la ciudad y aunque sigue un poco lejos cada vez va tomando mas forma. Es algo simplemente cabrón. Inmenso. Las torres que se ven a la distancia son triangulares, delgadas y altas. Muy altas. Hay algunas estructuras mas pequeñas pero la mayoría son estas torres y están separadas entre ellas por mucha distancia. No se ven amontonadas. Como si cada torre fuera de alguien en particular. Mientras camino, voy observando hacia la ciudad y me doy cuenta de algo. Agua. Abajo hay agua!. La luz que despide la ciudad no me dejaba ver pero ahora que estoy mas cerca hay como unos pequeños círculos que reflejan la luz del día y claramente se ve que es agua. Me emociono porque a falta de comida pues me puedo llenar de agua al menos. Vengo tan feliz que no me doy cuenta que delante mio hay una grieta en el suelo que esta oculta por la hierba y cuando la piso se me dobla el pie hacia la derecha, donde esta el acantilado. Creo que mi tobillo izquierdo valió madres porque trono horrible y siento un dolor agudo. El pie derecho busca algún apoyo pero la pendiente de la colina no me ayuda y se resbala en la hierba. Reboto con el hombro derecho sobre el piso y siento como empiezo a rodar hacia el vacío. Voy rodando sobre la hierba que huele bonito pero ahora lo único que puedo sentir es un dolor que se extiende desde mi pie izquierdo cada vez que golpea el suelo hasta la base del cerebro. De pronto el dolor cesa. Ya no hay golpes con el piso. Siento que caigo y extrañamente agradezco la sensación de paz. Mi cerebro ingenieril comienza a hacer cálculos rápidos: Si calcule una distancia de 2 mil metros hasta el fondo del acantilado y suponiendo que la constante de gravedad es igual que en la tierra de aproximadamente 10 metros por segundo cuadrado, entonces tardaré en llegar al fondo del acantilado como 20 segundos ya que me voy acelerando progresivamente.
Dicen que cuando estas por morir tu vida pasa frente a ti en unos instantes. Espero que tengan repeticiones con cámara "phantom"  de cuando le partí la madre al niño del vecino por haberme roto mi max steel el día de reyes.

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