Fiesta pagana

En estos últimos días se ha comentado mucho en nuestro país sobre la adopción de niños por los mal llamados "matrimonios homosexuales". para empezar, lo correcto sería decir "adopción por parejas del mismo sexo". La polémica comenzó hace unos años con la aprobación en el distrito federal de la ley de convivencias sociales, la cual le da reconocimiento ante la ley a hogares formados por personas sin algún lazo sanguíneo o alguna afinidad  como pasa con una pareja entre hombre y mujer que se unen y forman un hogar bajo la afinidad mutua que no necesariamente tiene que ser un matrimonio. Con esta ley quedo abierta la posibilidad de que parejas del mismo sexo pudieran "convivir" y tener derechos y obligaciones tales como heredar cuando uno de los "covivientes" fallezca y cosas así. La cuestión es que de ninguna manera la ley de convivencia social es igual a "matimonio" ya que los "convivientes" nunca pierden su estado civil; por ejemplo, si dos mujeres solteras u hombres solteros deciden "convivir" los dos siguen siendo solteros pero si tienen derechos y obligaciones entre ellos. Algo interesante de esta ley es que si uno de los "convivientes" tiene un hijo y llegara a fallecer, el conviviente sobreviviente heredaría como si fuera hijo del fallecido pero nunca podría, bajo esta ley, adoptar al hijo del fallecido en caso de ser menor de edad. Hasta ahí todo parecía bien y no hubo mayor revuelto pero en Marzo de este año, entro en vigor en la Cd de México la ley que permite, ahora si, "los matrimonios" entre homosexuales, que como digo no es lo correcto sino mas bien "la unión legal de parejas del mismo sexo" y quedo pendiente que la suprema corte resolviera la constitucionalidad de esta ley que implica ya la adopción de niños por estas parejas.

Ok ahora mis comentarios. Creo que en México tenemos mucho camino por andar en cuestión de entendimiento de leyes, en cuestión de derechos y mas que nada en cuestión de respeto hacia nosotros. Estamos todos en el entendido que lamentablemente en este nuestro país la ley no se respeta y tiene precio pero en cuestiones sociales como el matrimonio somos muy susceptibles y esto se debe a que particularmente esté se mezcla con un rito religioso que viene a dar al traste con todo y permite a las iglesias (cualquiera que sea pero particularmente a la católica) mas que dar una opinión, bendecir o satanizar al respecto. Otro factor que interviene es el hecho que como mexicanos somos altamente discriminatorios. Si eres de tez blanca o morena, si eres flaco o gordo, si estas guapa o fea, si eres de pelo lacio o chino, si eres rico o pobre, si eres alto o chaparro, si eres derecho o si eres zurdo, etc etc...discriminamos por todo y en todo momento. Ahora imagínense si eres de una preferencia sexual distinta, pues ya valió madres. La gente te señala o etiqueta como puto o como machorra o te dicen lesbiana o maricón. Y por supuesto que cuando vemos cosas tan aberrantes como un jerarca de la iglesia católica preguntando a sus feligreses "si les gustaría vivir con maricones y lesbianas" pues como que no. Somos un país que discrimina a todos y mas grave aún, somos un país homofóbico. Lo mas grave es que nos falta algo básico y se llama Respeto. Podemos o no estar de acuerdo con las cosas pero hay formas de expresar estas diferencias sin caer en el ataque vulgar y soez, sin despotricar sin ton ni son, sin ser "enanos mentales".

Al principio y debo aceptarlo yo también me oponía a que las parejas del mismo sexo adoptarán a niños pero luego de pensar un poco ya no estoy muy seguro. Basta con ver las condiciones actuales que vivimos día a día. Estamos en una situación muy mala con tantos problemas de inseguridad, de falta de valores, de falta de futuro, de valemadrismo generalizado, de corrupción desbordada y descarada, de materialismo y satisfacción inmediata vía drogas y reventón. ¿Realmente lo hemos hecho bien? ¿Le hemos dado a este país buenos ciudadanos? Es obvio que no. Basta con mirar alrededor nuestro y veremos que no. Las cosas están pa´l perrinsky. Es mas que claro que nuestras formas tradicionales de hacer las cosas no están funcionando. Decía Einstein que la locura se define por esperar cosas diferentes haciendo lo mismo y ciertamente eso es lo que esperamos; que las cosas cambien pero sin hacer nada, sin comprometernos en nada y creanme que eso no va a pasar. Antes de criticar y satanizar tenemos que dar la oportunidad a nuevas formas de pensar y de hacer. ¿Qué pasaría si las parejas del mismo sexo forman niños con valores morales sólidos? ¿Qué pasaría si estas parejas si le enseñan a sus hijos adoptivos a cuidar el planeta, a no discriminar, a no permitir la corrupción, a no ser parte del narco, a no fomentar la piratería, a no desperdiciar el agua, a reciclar, a aceptar a los demás como son? ¿Qué pasaría si ellos nos enseñan a todos nosotros, los "normales", a ser las personas que debimos haber sido?

Creo que al menos se merecen el beneficio de la duda, ¿no creen?